Rebelión en la isla de los perdidos.

       Había una vez dos amigas que eran hijas de dos hechiceras malvadas. Mal era hija de Maléfica, Señora de las Tinieblas, y Uma, hija de Úrsula, la bruja del mar y ambas vivían el la Isla de los perdidos. Estudiaban en istitutos rivales y por eso no se veían mucho.

       Un día estaban gastando una broma al Capitán Garfio cuando de repente vieron venir a su archienemiga Cruella De Vil. Las dos niñas quisieron vengarse de ella...entonces quisieron verter un mejunje por el muelle por el que ella caminaba Cruella,con tal mala suerte que se les resvaló el cubo y se vertió el mejunje por donde estaba Mal...por esto se enfadaron las dos amigas, el plan había fallado y las dos estaban sucias. Desde entonces se hicieron enemigas.

       Unos años después, el príncipe Ben, les dio a Mal y su pandilla la oportunidad de estudiar en Áuradon, con el fin de que se reformaran.

       Cuando aprendieron a ser buenos, hubo un festival en Áuradon. Después de la actuación del rey Tritón, Arabella, nieta de Tritón, quiso coger prestado el tridente de su abuelo....cuando de repente vino una fuerte tormenta y el tridente salió por los aires. Arabella se lo contó a Mal y su panda y ellos investigaron y descubrieron que el Tridente estaba en la Isla de los Perdidos y que Uma lo estaba buscando.

       Entonces fueron corriendo allí para intentar recuperarlo antes de que lo hiciera Uma. Lo consiguieron gracias al rey Ben y a los hechizos de Mal.

       Así fue cómo la normalidad regresó a Áuradon y todos pudieron vivir felices.