Los cuatro brujos

Una vez había cuatro brujos que convivían juntos, el primero era el brujo de la tierra, el segundo era del agua, el tercero era del aire y el cuarto era del bosque. Ellos paseaban y se encontraron guerreros, los cuatro se acercaron y vieron que eran vikingos. Los brujos les siguieron pensando que los vikingos eran buena gente, pero estos destrozaron los árboles y consiguieron entrar en la torre mágica de los brujos. Pasaron los  días y los brujos pasando frío no encontraban refugio, decidieron hacer un ataque sigiloso, después de unos minutos llegaron a la puerta y planearon el ataque. 

Al entrar vieron dos guardias y el brujo de agua hizo una pequeña ola, los vikingos no pudieron hacer nada, la ola les cogió, de la fuerza los mandó al quinto pino. Los brujos entraron por la puerta, en las escaleras se encontraron seis vikingos y el brujo del bosque amplio su mano como si fuera una rama gigantesca, la estampó  contra los guerreros y los hizo caer. Siguieron subiendo por las escaleras, en lo más alto está vigilando el vikingo más grande jamás visto, el brujo de aire  para quitarlo del medio le envió aires huracanados y lo mando a las estrellas.

Para celebrar la victoria de la conquista de la torre, el brujo de la tierra que era el más anciano hizo un hechizo para impedir que los vikingos pudieran conquistar otra vez la torre.

Por la victoria brindaron varias veces y siguieron viviendo en su torre felizmente.